Taller de pintura
Antes de que el color entre en juego, tienen lugar varios procesos de pretratamiento. Se empieza por una limpieza, seguida de la fosfatación, el baño cataforético, el secado y, finalmente, el pintado de las carrocerías. El control de calidad final garantiza un resultado perfecto.
En el diseño nuevo de instalaciones de pintura a menudo se requieren procesos de producción flexibles. La clásica secuencia en serie se sustituye, por ejemplo, por conceptos escalables y ajustables a las capacidades de producción.
Dependiendo del concepto elegido y los sistemas de transporte utilizados, se requieren sensores no solo para la seguridad de las máquinas y la identificación, sino también para la detección de la posición y los contornos. En el interior de las cabinas de barnizado o en las inmediaciones de los baños cataforéticos, los sensores deben tener una certificación EX para su uso en zonas con riesgo de explosión, además de un índice de protección IP alto.